Los Dallas Mavericks están de moda en la NBA. Después de un verano en el que el gran nombre lo puso Kristaps Porzingis con su renovación, pero en el que también se formó una rotación muy profunda de jugadores de rol al mando de Rick Carlisle, podíamos esperar que los Mavs fuesen mucho más competitivos que en las temporadas anteriores. Sin embargo, ni los más optimistas habrían imaginado que entrando ya en el parón del All Star Dallas iba a estar en la zona noble de los puestos de Playoffs de la Conferencia Oeste.
Kristaps Porzingis va cogiendo ritmo. Después de más de un año y medio sin jugar, la apuesta que hicieron por él los Mavs con el traspaso a finales de enero de 2019 y su renovación en verano empiezan a dar sus primeros frutos. Su adaptación al sistema está siendo progresiva, y aún podemos ver que no está en su mejor versión en el apartado físico, pero a pesar de eso el letón está promediando 18.4 puntos, 9.1 rebotes (career-high) y 1.9 tapones por encuentro. Lo más importante quizás sea su compromiso en la defensa, donde está funcionando como ancla.
El resto de la rotación también parece establecerse con el paso de las semanas. Tras la incorporación de Delon Wright, Seth Curry o Boban Marjanovic cabía esperarse un periodo de adaptación, y parece que las evoluciones son correctas. Se ha hablado mucho de que Dallas no tiene una tercera espada, pero la profundidad de plantilla con la que cuentan, puesta además en las manos de Rick Carlisle, conforma una rotación amplia que suple esa carencia con la aparición de varios secundarios cada noche. En 720 minutos sin sus dos estrellas europeas en la pista, el resto de los Dallas Mavericks está siendo 1.59 puntos por cada 100 posesiones mejores que sus rivales, según los datos de PbpStats.
Pero si hay un nombre que está brillando por encima de todo lo demás, ese es indudablemente el de Luka Doncic.
Ver jugar a Luka Doncic se ha convertido en un acontecimiento. Basta con entrar en las redes sociales durante un partido de los Dallas Mavericks para ver que todo el mundo del baloncesto está pendiente de Doncic. Gente como el periodista Bill Simmons confiesa que está incluso obsesionada con ver los partidos del esloveno. En España los horarios de los encuentros no acompañan, pero también se está convirtiendo en tradición que los aficionados al baloncesto se despierten con un “buenos días. Vamos a ver qué ha hecho Luka hoy”.
La misma NBA es más que consciente del interés que despierta Doncic tanto en el público estadounidense como en el europeo. Por eso los Dallas Mavericks cuentan con hasta 8 partidos en lo que la liga denomina #NBASaturdays y #NBASundays, partidos en prime time europeo, y contra rivales de entidad como los Houston Rockets o Los Angeles Lakers.
Precisamente las actuaciones de Doncic, especialmente en esas fechas marcadas en el calendario, elevaron su estatus a candidato al MVP en el comienzo de la temporada. Los dos esguinces de tobillo que ha sufrido en los últimos meses han parado un poco su ritmo, pero casi todos los analistas coinciden a la hora de colocar al esloveno como al menos uno de los cinco mejores jugadores de esta temporada.
“Todos desearían tener un joven de 20 años que juegue como él “, dijo una leyenda como Jerry West al Dallas Morning News. “He visto muchos jugadores especiales. ¿Cuántas super estrellas hay en la liga en un momento dado? Tal vez cinco o seis. Hay una diferencia entre un All Star y una super estrella. Una super estrella es diferente y él lo es. Mira a Dallas. Un jugador los ha transformado en un equipo de Playoffs. Será el mejor jugador que Dallas haya tenido. Tengo un gran respeto por Nowitzki, pero Dirk no es él”.
“Es increíble escuchar cosas así de alguien como Jerry West”, respondió Luka. “Pero para llegar a ser algo un poco parecido a Dirk Nowitzki necesito mejorar mucho. Pasar a Dirk es una de las cosas más difíciles que se pueden hacer. Va a ser muy difícil”.
Su humildad, autocrítica y ganas de mejorar constantes prometen convertir a Luka en uno de los mejores que hayamos visto. No sabemos si mejor que Dirk Nowitzki, pues eso sabemos que son palabras mayores, como él mismo reconoce. Pero Luka ya se está colocando entre los mejores.
Doncic ya ha alcanzado los 116 partidos en su carrera en la NBA. A pesar de bajar su rendimiento en la recta final de la temporada pasada, su evolución es más que clara.
Periodo de tiempo | Puntos por partido | Rebotes por partido | Asistencias por partido |
---|---|---|---|
Año rookie | 21.2 | 7.8 | 6.0 |
Año sophomore | 28.9 | 9.5 | 7.0 |
Carrera | 24.1 | 8.5 | 7.0 |
Este aumento de la producción va emparejado, como es lógico, a un aumento también del uso. Ahora mismo Doncic es el segundo jugador en la NBA con un porcentaje de uso mayor, solo por detrás de Giannis Antetokounmpo, y justo por delante de James Harden. Según los datos de NBA.com es el cuarto jugador que más tiempo tiene el balón en sus manos. Pero ese aumento de uso ha ido acompañado de una eficacia muy elevada. Aunque es inevitable el incremento también en las pérdidas de balón, de entre los 13 jugadores que superan el 30% de uso esta temporada Luka también se encuentra entre los mejores en True Shooting Percentage, colocándose por encima de Joel Embiid, Kawhi Leonard, Paul George, LeBron James, etc. (vía Basketball-Reference).
Cuanto mayor es la tensión, más se crece Doncic. Hace unas semanas los Houston Rockets amenazaban con completar una gran remontada, poniéndose a cinco puntos cuando los Mavs habían ido cómodamente por delante por dobles dígitos durante todo el partido. Entonces, tras un tiro libre fallado por Clint Capela, vimos a Doncic coger el rebote y hacer un gesto claro al banquillo: tranquilos. Yo me encargo.
Eso es lo que diferencia a los grandes jugadores de aquellos que superan esa categoría y marcan a toda una generación. La capacidad para crecerse en los momentos calientes y la inteligencia para leer las diferentes fases del juego. Para analizar cada momento y decidir qué es lo que necesita el equipo en ese instante. Y para rematar la faena con un instinto asesino pocas veces visto anteriormente. Y todo ello aún con 20 años.
Los cánticos de “MVP, MVP” de los aficionados de los Mavs podían escucharse mientras lanzaba tiros libres en la cancha de los Houston Rockets.
“Fue bonito”, dijo Doncic tras el partido. “Escuchar eso fue algo muy bonito. Nunca me imaginé que eso me sucedería en la NBA. Es algo especial”.
Tan especial como el mismo Luka, con quien Mike D’Antoni se deshizo en halagos después del choque.
“Dicho con simpleza, es un gran jugador de baloncesto”, dijo D’Antoni. “Ya era muy bueno en Europa a los 16 o 17 años. Sabe cómo jugar, tiene un gran cuerpo, lanza de tres, tiene un gran step-back, lo tiene todo. Puedes ver en su cara que ama este juego. Tiene un gran futuro, eso es algo seguro”.
Este fin de semana Luka Doncic participará en el All Star Game, su primera presencia en el partido de las estrellas. Doncic finalizó segundo en las votaciones de los fans en la Conferencia Oeste, perdiendo por una cantidad muy pequeña contra LeBron James. Antes de que James y Giannis Antetokounmpo se repartiesen a sus compañeros, Luka ya dejó claro lo que significaría para él jugar junto a LeBron, algo que finalmente podrá hacer.
“Sería algo increíble”, dijo Doncic al saber que estaría en el All Star. “Todo el mundo sabe lo que LeBron significa para mí. Sería algo especial, desde luego”.
No hay nada como ver el último partido de Dallas, el regreso de Luka con victoria contra los Sacramento Kings, para entender su importancia en la franquicia. No solo la confianza de sus compañeros parecía mayor, también el AAC tenía un ambiente diferente, más alegre.
“Ha sido un gran partido. Estoy contento simplemente por poder jugar al baloncesto, y también por haber logrado una victoria”, dijo Doncic tras el partido. “(Mi conexión) con Porzingis cada vez mejora más, y va a seguir haciéndolo. Tenemos que seguir trabajando en ello”.
Desde el 16 de diciembre Doncic y Porzingis solo han jugado juntos en 9 partidos de 30 posibles, debido a las molestias en el tobillo del primero y en la rodilla del segundo. A pesar de ello, los Mavericks llegan al parón del All Star con un balance de 33-22, un ritmo de 49 victorias, y siendo conscientes de que tienen aún mucho margen de mejora, especialmente con su récord de 15 victorias y 14 derrotas en casa.
“Hoy todo ha salido bien”, decía Porzingis después de la última victoria. “Luka está haciendo un buen trabajo comunicándose conmigo para ver dónde quiero recibir el balón. Y está empezando a encontrarme en las zonas en las que me siento más a gusto. Lentamente esas cosas están empezando a encajar. Creo que según seguimos trabajando juntos, jugando juntos, la conexión cada vez va a ser mejor y mejor”.
Luka Doncic es ahora mismo una de las mayores atracciones de la NBA. Pocas veces vemos el nacimiento de una mega estrella de una forma tan explosiva. Y nadie quiere perdérselo.
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